En el corazón de la vibrante Zona Romántica de Puerto Vallarta, donde el amor y la diversidad se celebran sin reservas, ha surgido un nuevo ícono: el Árbol del Amor y la Diversidad. Este proyecto, que nació de la visión de un grupo de empresarios, ha logrado convertir un árbol abandonado en un símbolo de esperanza y transformación para la ciudad.
Ubicado entre las calles Pino Suárez y Púlpito, junto a la carretera a Manzanillo, esta higuera (ficus ssp) gigante solía ser un espacio olvidado y descuidado. Su tamaño descomunal lo convertía en un refugio para la basura, escombros e incluso para personas en situación vulnerable que buscaban refugio en su interior. Esta situación no solo afectaba la imagen de la zona, sino que también representaba un riesgo para la salud y seguridad de la comunidad.
Ante esta realidad, Arabela Guajardo de aMi agencia y su equipo se propusieron darle un nuevo significado a este árbol. Con el apoyo de colaboradores como Comex, Taniel Chemsiam Properties, Pinnacle Resorts, Nómada, Muro Arte Vallarta, Thomson y el Ing. Fabián Duarte quien diseñó el proyecto de ingeniería y ejecutó la obra, transformaron el espacio en un símbolo de amor, unidad e inclusión.
El Árbol del Amor y la Diversidad no es solo una obra de arte monumental, sino una representación de la esencia de Puerto Vallarta. Sus colores vibrantes y su diseño armonioso reflejan la alegría, la pasión y la diversidad que caracterizan a la ciudad.
Más allá de su belleza estética, este proyecto es un mensaje de esperanza y transformación. Demuestra que los cambios son posibles, que con voluntad, colaboración y pasión por lo que se hace, los sueños más ambiciosos pueden hacerse realidad.