Invertir en preventa es una de las estrategias inmobiliarias más rentables del momento, pero también es un terreno donde muchos inversionistas primerizos cometen errores costosos que podrían haberse evitado con información y asesoría adecuada.
Comprar en preventa no es lo mismo que comprar una propiedad lista para habitar. Es un modelo con ventajas claras (precio bajo, plusvalía acelerada, planes de pago flexibles), pero con particularidades que exigen atención y visión a largo plazo.
A continuación te detallo los errores más frecuentes que cometen quienes se inician en este tipo de inversión —y lo más importante— cómo evitarlos.
Error 1: Elegir solo por precio y no por ubicación
Muchos inversionistas caen en la trampa del “precio atractivo” sin considerar la ubicación real del proyecto.
Comprar barato en una zona poco desarrollada o con problemas de acceso puede condenar la inversión a estancarse en plusvalía o ser poco atractiva para renta o reventa.
¿Cómo evitarlo?
- Verifica la ubicación exacta.
- Investiga el potencial de crecimiento de la zona.
- Revisa accesos, infraestructura, servicios y seguridad.
- Prefiere ubicaciones dentro de zonas consolidadas o en expansión real.
Error 2: No investigar al desarrollador
Este es el error más grave y más común.
No todos los desarrolladores cumplen sus promesas. Hay empresas que nunca entregan, entregan mal, o hacen modificaciones sin previo aviso.
¿Cómo evitarlo?
- Investiga el historial del desarrollador: ¿Qué otros proyectos ha entregado? ¿En tiempo y forma?
- Lee reseñas de otros compradores.
- Verifica que tenga permisos y licencias vigentes.
- Pregunta por proyectos anteriores y visítalos si es posible.
Error 3: No entender el contrato ni las condiciones de entrega de una preventa
Muchos inversionistas firman sin revisar a fondo:
- Fechas de entrega.
- Condiciones de pago.
- Especificaciones de acabados.
- Penalizaciones por retraso (o su ausencia).
- Responsabilidades legales.
¿Cómo evitarlo?
- Contrata un abogado inmobiliario que revise el contrato.
- Asegúrate de que esté especificado lo que incluye la propiedad: equipamiento, estacionamiento, bodega, áreas comunes.
- Pregunta por garantías de obra o vicios ocultos.
Error 4: No considerar los costos ocultos
El precio de preventa no es el precio final.
Muchos compradores no consideran:
- Gastos notariales (5%–7% del valor).
- Pago de fideicomiso si son extranjeros.
- Equipamiento adicional si la propiedad se entrega “en obra blanca”.
- Costos de mantenimiento mensual.
¿Cómo evitarlo?
- Haz un presupuesto total: precio + gastos de cierre + equipamiento + mantenimiento.
- Pregunta desde el inicio qué está incluido y qué no.
- Reserva un fondo para gastos adicionales.
Error 5: No calcular el ROI real
Muchos inversionistas compran pensando solo en la plusvalía, pero no hacen un cálculo realista del retorno de inversión (ROI) si planean rentar.
Sobreestimar ingresos por noche o subestimar costos de operación es un error que afecta la rentabilidad.
¿Cómo evitarlo?
- Consulta estudios de mercado en la zona.
- Haz un cálculo conservador de ocupación (60%–70% anual).
- Incluye en tus cálculos: limpieza, mantenimiento, comisiones, impuestos.
- Pregunta a expertos o administradores de renta locales por cifras reales.
Error 6: Creer que la preventa es una inversión a corto plazo
Invertir en preventa es un modelo de mediano a largo plazo.
Quienes compran pensando en revender en cuanto esté lista la propiedad pueden encontrar un mercado saturado o restricciones para revender inmediatamente.
¿Cómo evitarlo?
- Enfoca tu inversión con horizonte de al menos 3–5 años.
- Considera el modelo híbrido: rentar durante un tiempo y vender cuando el mercado esté más alto.
- Consulta si el contrato de compra permite reventa antes de escriturar (no siempre es posible).
Error 7: No proteger su inversión legalmente
Es indispensable proteger el dinero que entregas durante la obra.
Algunos inversionistas pagan directamente a los desarrolladores sin verificar la existencia de fideicomisos o cuentas de garantía.
¿Cómo evitarlo?
- Prefiere proyectos con fideicomiso bancario desde preventa.
- Pregunta por cuentas de garantía o mecanismos de protección de tus pagos.
- Nunca entregues dinero sin comprobante y contrato formal.
Invertir en preventa sigue siendo una de las mejores estrategias inmobiliarias en México, pero no es un modelo para improvisar.
La rentabilidad está en los detalles: elegir al desarrollador correcto, entender lo que compras, prever todos los costos y tener claridad sobre los tiempos de retorno.
Con información adecuada, asesoría profesional y un análisis serio, la preventa puede ser una de las mejores decisiones patrimoniales de tu vida. Sin ella, puede convertirse en una experiencia frustrante y costosa.