El esperado Puente Amado Nervo —antes conocido como Puente Federación— finalmente comenzará su construcción, marcando un hito de conectividad para la Bahía de Banderas y el corredor turístico Puerto Vallarta–Riviera Nayarit. Esta nueva infraestructura no solo transformará la movilidad de la región, sino que ya proyecta un impacto directo en el desarrollo inmobiliario y económico del Pacífico mexicano.
Un proyecto estratégico para la Bahía
El Puente Amado Nervo se levantará sobre el río Ameca, el límite natural que divide a Jalisco y Nayarit. Conectará de forma directa la localidad de San Vicente (Bahía de Banderas, Nayarit) con Verde Vallarta (Ixtapa, Puerto Vallarta, Jalisco), mejorando radicalmente los tiempos de traslado en uno de los corredores turísticos más importantes de México.
El proyecto contempla 1.8 kilómetros de extensión total, de los cuales 1.55 km corresponden a sus modernos accesos viales, diseñados para optimizar el flujo vehicular diario y aliviar la actual congestión en la región metropolitana de la Bahía.
Inversión millonaria y cronograma definido
La inversión estimada supera los 900 millones de pesos, financiados principalmente por el Gobierno Federal. La obra está programada para iniciar el 25 de junio de 2025 y se prevé que su construcción tome aproximadamente dos años, con fecha estimada de entrega en 2027. Este cronograma claro brinda certeza a los planes de inversión y desarrollo vinculados al proyecto.
Un puente que transformará la dinámica inmobiliaria
Más allá de su función vial, el Puente Amado Nervo Jalisco Nayarit será un catalizador inmobiliario de gran alcance:
Incremento de plusvalía
Las zonas colindantes al puente experimentarán un aumento sostenido en el valor de terrenos, viviendas y propiedades comerciales. La mejora en accesibilidad hará que estas áreas sean más atractivas tanto para quienes buscan vivienda como para desarrolladores de nuevos proyectos.
Nuevos desarrollos residenciales y turísticos
La mejor conectividad impulsará la construcción de:
- Viviendas permanentes y vacacionales
- Condominios turísticos
- Hoteles y resorts
- Zonas comerciales y de servicios
Esta dinámica atraerá capital tanto nacional como extranjero, posicionando a la región como uno de los mercados inmobiliarios más competitivos del Pacífico.
Expansión urbana ordenada
El nuevo puente permitirá integrar áreas que antes quedaban fuera del mapa urbano inmediato. Esto abrirá oportunidades para planear crecimientos urbanos más ordenados, conectados y sostenibles en Bahía de Banderas y Puerto Vallarta.
Impulso económico multisectorial
El auge inmobiliario derivado generará demanda de:
- Mano de obra para construcción
- Servicios profesionales: agencias inmobiliarias, notarías, despachos legales
- Arquitectura, diseño y desarrollo de proyectos
Todo este movimiento estimulará la economía regional de manera transversal.
Un proyecto largamente esperado
Durante más de una década, el Puente Amado Nervo ha sido solicitado como obra prioritaria por empresarios, desarrolladores, autoridades y residentes. Su construcción marca un avance crucial para la consolidación económica de la región.
Con más de medio millón de habitantes en la zona metropolitana de la Bahía, esta infraestructura es clave para acompañar el crecimiento de una región que se proyecta como uno de los polos turísticos, inmobiliarios y económicos más dinámicos de México durante los próximos años.